La responsabilidad civil extracontractual y contractual representa dos pilares fundamentales del derecho civil peruano. Ambas buscan reparar los daños causados a una persona, pero su diferencia principal radica en el origen del deber de indemnizar.
La primera surge cuando existe un contrato entre las partes; en cambio, la segunda, cuando no hay vínculo previo.
Estas categorías definen el tipo de obligación que se infringe, así como los criterios legales aplicables para exigir reparación.
Código civil de responsabilidad extracontractual
El Código Civil de Perú regula ambos regímenes. En el caso del seguro de responsabilidad extracontractual, los artículos 1969 al 1988 establecen que una persona debe indemnizar a otra si causa un daño por dolo o culpa. Este tipo de responsabilidad se activa en situaciones donde no hay contrato previo entre las partes, como accidentes de tránsito, lesiones personales o daños ambientales.
Para que proceda esta responsabilidad, deben cumplirse ciertos elementos: antijuridicidad (acto contrario a derecho), daño, relación de causalidad y un factor de atribución (subjetivo u objetivo). El artículo 1970, por ejemplo, establece la obligación de reparar daños causados durante actividades riesgosas, incluso sin intención de dañar, aplicando una lógica de riesgo creado.
Es común en actividades empresariales donde puede haber accidentes que afecten a terceros: por ejemplo, caída de objetos en una obra, daños a vehículos o lesiones a personas ajenas al contrato.

Seguro de responsabilidad civil contractual
Esta se regula en los artículos 1321 al 1332 del Código Civil. Ocurre cuando una de las partes incumple un contrato, ya sea por dolo, negligencia o por no aplicar la diligencia exigida. Si el incumplimiento genera un perjuicio económico o personal a la otra parte, esta puede exigir indemnización.
El artículo 1321 indica que el resarcimiento puede cubrir tanto el daño emergente (pérdidas directas) como el lucro cesante (ganancia no percibida). Según el artículo 1322, también puede incluir el daño moral, si el incumplimiento afecta derechos de la personalidad. La ley reconoce distintos grados de culpa: leve, inexcusable o dolo, y en función de ellos se determina el alcance de la indemnización.
En estos casos, el seguro actúa como respaldo financiero para las empresas o personas que, ante un incumplimiento, deben asumir el pago de una indemnización.
Diferencias clave entre ambas responsabilidades
Principio de reparación integral
En ambos regímenes, el objetivo del derecho civil no es sancionar, sino reparar el daño causado. El Código Civil peruano aplica el principio de reparación integral, que exige restituir, en la medida de lo posible, la situación previa al daño.
Esto implica que el responsable debe cubrir:
- Daños patrimoniales: como el costo de reparar bienes dañados (daño emergente) o las ganancias no percibidas (lucro cesante).
- Daños extrapatrimoniales: como el sufrimiento, la angustia o la afectación a la integridad personal (daño moral o daño a la persona).
Este principio asegura que la indemnización no se limite a una compensación simbólica, sino que tenga un efecto restitutivo real, tanto en el ámbito económico como personal.

Elementos comunes a toda responsabilidad civil
Ambos regímenes comparten algunos elementos esenciales:
- Antijuridicidad: el acto debe ser contrario a la ley o al contrato.
- Daño: puede ser económico (daño emergente y lucro cesante) o extrapatrimonial (daño moral, daño a la persona).
- Relación de causalidad: el hecho debe tener una conexión directa o adecuada con el daño.
- Factor de atribución: subjetivo (culpa o dolo) u objetivo (riesgo creado).
Estos elementos guían la evaluación legal y la determinación de la indemnización.
Prevención de pérdidas y asesoría legal
Contar con herramientas legales y contractuales no evita del todo la aparición de daños. Por eso, cada vez más empresas adoptan estrategias de prevención de pérdidas y contratan seguros específicos. Un seguro de responsabilidad civil permite cubrir los costos asociados a una demanda y garantizar la continuidad operativa.
Además, en situaciones complejas (como colisiones múltiples, daños ambientales o incumplimientos contractuales en cadena) resulta indispensable contar con asesoría legal especializada en derecho civil. Esta ayuda permite evaluar correctamente los elementos del caso y plantear defensas o demandas eficaces.
Gestión de riesgos legales en contratos y operaciones
La responsabilidad civil extracontractual y contractual permite proteger derechos vulnerados, restablecer el equilibrio entre las partes y exigir compensaciones legales cuando se produce un daño.
Ambos regímenes comparten fundamentos comunes, pero aplican reglas distintas en cuanto a origen, prueba, plazos y criterios legales.
En Avla te ayudamos a enfrentar los riesgos legales de tu actividad. Revisa nuestro seguro de responsabilidad civil y asegura la continuidad de tu empresa.